Mis Adorables Vecinos

Ya he comenzado una nueva fase en mi residencia, conocer gente por los pasillos; "Vecinos, esos grandes desconocidos" podria haber titulado un articulo. jeje. Les oyes abrir y cerrar puertas, les oyes roncar, les oyes ducharse, les oyes cuando visitan al Sr. Roca, incluso de vez en cuando emiten algún sonido parecido a una palabra, pero es imposible verlos. Me siento como Bruce Willis en el 6º sentido. =) A lo que iba, que además de haber descubierto que el finlandés del Athletic vive en mi mismo edificio... con el que, por cierto, tuve una fluida conversación sobre los sistemas de juego de Mendilibar ¿¿...?? y me dijo que "no se le puede pedir peras al olmo" ¿¡¿¡¿...?!?!? Lo sé, lo sé... yo tampoco os creería.

Total, que tengo un vecino, Antonio, de esos de los de prestarse la sal y hablar en el rellano, jeje. Tenemos ya un 98% de convencimiento de ser los únicos españoles en el edificio. Tan sólo diré que el lunes cenamos juntos unas alubias blancas con Fernando, otro amiguete, en nuestra cocina y la conversación derivo en que como Antonio estudia enología y todos los días va a hacer practicas a una bodega pues que para el miercoles se traía unas botellitas de vino para cenar. Basicamente yo me encontraba estudiando en mi habitación en pijama con intención de continuar después de cenar y casi vuelvo gateando de la cocina una hora más tarde... jeje. Claro, que si prueba este vino blanco de no se que, y este otro tinto de no se cual... y todo bién acompañado de unas alubias pintas (plato predilecto en nuestra cocina) pues la noche se torció un poco...

Echarse un amiguete enólogo tiene riesgos que hay que correr ¿no? ;)

Aqui teneis al culpable que no quiere dar la cara... jajajaja.