Crónica de un San Bourbaki en el Exilio

San Bourbaki te vigila

Este cielo gris, esta niebla y este frio sólo pueden significar una cosa, que termina Noviembre. ¿Y sabéis por qué ocurre así? De pequeños, seguramente, os han enseñado que es debido a la llegada de Invierno. Desde aquí digo que Invierno no tiene culpa alguna, es un buen tío y siempre llega puntual.

Sin embargo, todos los años, hay otro hecho que provoca que, allá arriba, en el cielo, ande un poco revuelto el Santoral. Si, si, como os lo cuento. Todos los santitos que ha creado la Santa Madre Iglesia bajo su criterio, están inquietos y nerviosos porque algo, que no pueden controlar, está a punto de ocurrir. Y es que, la envidia que nuestro profano Bourbaki genera en la mesa del Señor es sabida por todos.

Y como no podía ser de otra forma, sucedió un año más. Este último viernes de Noviembre ya está aquí. Y yo…, yo no estoy allí. Ciertamente, se me hace muy extraño vivir este día lejos de mis camaradas. Si alguna fecha está marcada en rojo en mi calendario, no son ni mi cumple ni Nochevieja… es San Bourbaki. Fiesta de los matemáticos de Valladolid, podría pasarme horas describiendo los sentimientos que me produce, a mí y a todos mis colegas, pero ese no es mi objetivo hoy, solo diré que es algo grande, MUY GRANDE.

Llevo toda la semana pensando en ello… que viene, que viene,.. y creo que ha sido la semana más larga desde que estoy aquí… pasaban los días lentamente como una condena a perderme el sagrado viernes =). Ahora comprendo un poco mejor el exilio, debe ser muy duro estar lejos de tu casa sin derecho a volver durante quién sabe cuánto tiempo… De todas maneras, pensándolo bien, los más grandes sufrieron en sus carnes el exilio, un tal Albert Einstein, Victor Hugo, Mario Benedetti, Karl Marx… ¿por qué iba a ser yo menos? Jeje. Incluso, no hace tanto, un tal Raul vió desde el exilio como su selección ganaba una Eurocopa de fútbol, jajaja.

Además si la semana era larga de por sí, tuve exámenes lunes, martes y miércoles de los cuales puedo estar satisfecho. La relación entre el esfuerzo realizado y la calificación es un concepto muy diferente al que traía de casa, =) cuando tenga las notas divagaré sobre ello.

Hoy me he levantado como un reloj a pesar del trasnoche de ayer, y me he dicho:

-Jonatan, Hoy es san Bourbaki.-

Y ya me ha dado por sonreir =D Lo primero que he hecho es lo mismo que todos los años; mandar un sms a mi camarada y amigo; Gabriel Amigo. -¿Qué tiempos hemos pasado, eh?- Después, por supuesto, he telefoneado al lugar donde sabía que estaría la fiesta y me he animado aún más cuando Sergey me ha descolgado y he oído el mítico:

-¿Qué día es hoy?-

Y no he podido resistirme a responder a semejante provocación:

-“Hooooy es Saaaan Bourbakiiiii, converjamos en unioooon….”-

le he cantado a mi teléfono móvil, ¡qué momento! Tras unos cuantos saludos y recibir un “Jonás!!!” grupal me he dicho:

-Empieza a escribir-

Y aquí estoy, viviendo este momento de soledad-felicidad tan extraño, dialogando con mi portátil y recordando todos los buenos momentos que disfruté en los 7 San Bourbakis anteriores, cada uno de una forma y de un color.

-Gente…-, seguiré pensando en vosotros durante todo el día y sabré lo que hacéis en cada momento jeje, sed buenos, quemad a nuestro Bourbaki como es debido, y de vez en cuando brindad a mi salud!

¡Un abrazo a mis matemáticos favoritos!

Yo ahora, no creáis que me quedo en casa, voy a buscar a Rafa y Rocío que por aquí andan y lo festejaremos como en los viejos tiempos (o no tan viejos), quizás nos encontremos con Bourbaki en alguna tasca…

¿¿Que día es el hoy?? ... Aquí nadie sabe la respuesta…

¡Pero me da igual!

C.Q.D.